Siempre oímos hablar de que, en los naipes del Tarot, la última palabra la tienen los arcanos. Pues bien, es cierto que son ellos quienes rigen las revelaciones del Tarot, pero solemos hacer referencia a los arcanos mayores, olvidando la funcion de los arcanos menores.
Los arcanos menores son un mazo mucho más estándar que el de arcanos mayores. Contienen 40 o 56 cartas (esto depende de cómo se los considere, pues muchos tarotistas consideran que 16 de ellos son figuras de la corte y que no son arcanos. La peculiaridad de estos arcanos a diferencia de los mayores es que cada uno lleva un palo, como en las barajas tradicionales.
¿Cuál es la función de los arcanos menores?
Los arcanos menores son las cartas encargadas de mostrarnos cosas sobre la vida cotidiana en su aspecto más mundano. Es por eso que inclusive en muchas de esas cartas las ilustraciones aluden a quehaceres habituales. Funcionan de forma complementaria con los mayores, y se leen de una forma diferente, pues además de tener cada carta su significado intrínseco, el palo al que pertenecen le añade un valor totalmente nuevo.
Cuando una tirada incluye a los arcanos menores se vuelve mucho más precisa, para exacta. Esto implica, también, que se debe evaluar muchos factores nuevos. Por ejemplo, tendrá un significado especial para el tarotista si un palo sale muchas veces en una misma tirada. Lo mismo sucederá cuando un número se repita, pues en numerología esto tiene un valor especial.